Abstract
Dentro de un horizonte de largo plazo, en el cual Colombia necesita de unos sesenta años para reconstruir el tejido social, familiar y personal destruido por más de cinco décadas de todo tipo de violencias, la presente ponencia se interroga sobre: ¿cuál es el papel de los carismas educativos que inspiran a las universidades católicas en su propósito de contribuir a la construcción de la paz a través de una formación en y para la cultura de paz? A partir de una mirada a la realidad suscitada por el plebiscito en su jornada electoral del 2 de octubre del 2016, reflexiona sobre el aporte de los carismas educativos y las universidades católicas para intervenir la violencia directa, estructural y cultural, y las implicaciones del paradigma del bienestar y buen vivir con la pobreza y los pobres, el fortalecimiento institucional y la construcción de regiones. Se concluye con la propuesta de una universidad como laboratorio de cultura de paz.